Sobre el concepto de “partido obrero”
- pablosviajsk
- 13 ene 2021
- 3 Min. de lectura
Hay que abandonar la idea moralista o esencialista mecanicista de la clase obrera ¿Por qué no reconocer que la clase puede formar partidos que expresen potencias destructivas que broten de su propio fundamento en lugar de colocarle cómodamente el mote de "partido burgués" para conjurar los problemas históricos concretos bajo una etiqueta tranquilizadora que pase por alto la necesidad de la educación socialista y de la formación científica de los obreros? Siempre el mecanicismo lineal para pensar a la clase obrera es el corolario de la visión espontaneísta del socialismo y el esencialismo de clase. ¿Por qué cualquier partido de masas no sería un partido obrero? Si está casi totalmente compuesto por sectores obreros ¿Porque sostiene la fragmentación productiva? ¿Porque hace alianzas con la burguesía? Detrás del mote de "partido obrero" se esconde más que lo que se dice. Cuando se usa el eufemismo "obrero" en realidad se refiere a partidos comunistas, o basados en sindicatos con ideas socialistas, pero no "obreros", ya que la composición de clase claramente no es lo que define. Y más si tenemos en cuenta que la mayor parte de todos los partidos modernos están compuestos por fracciones de la clase obrera. Esta confusión proviene de seguir sosteniendo una concepción moral de obrero, que impide pensar la existencia de partidos obreros que no expresen siempre y en todo momento la solidaridad de clase como socialismo sino como forma de competencia nacional reaccionaria. Ese día se podrá pensar a la política que producen los obreros sin sesgos infantiles ni idealizaciones. El abandono del análisis mecanicista de la clase obrera permite pensar mejor los fenómenos históricos sin el sesgo ideológico de adjudicarle a lo obrero siempre adjetivos ad-hoc caprichosos como “reformistas”, “revolucionarios”, “deformados" "burgués" o "burocratizado" para salvar la hipótesis esencialista de la clase obrera. Si decimos que un partido que no persigue fines socialistas o a favor de toda la clase obrera no sería "obrero" a pesar de su composición entonces simplemente estamos diciendo que ser obrero es ser socialista. En los análisis de la izquierda se confunde permanentemente socialismo (una forma de consciencia obrera en tanto colectivo) con "obrero" como sinónimos ¿Acaso la clase obrera no puede hacer cosas monstruosas? Todo partido de masas es un partido obrero por definición. Expresa formas de conciencia de la clase obrera. De otra manera terminamos reproduciendo el análisis paternalista de Trotsky que reducía el problema de la política a un "engaño". A un puro capricho subjetivista. La materia siempre se expresa en sus potencias. Las formas de consciencia no son engaños arbitrarios. Las formas de consciencia de la clase obrera engendran también alianzas con la burguesía que coagulan en partidos. No son "engañadas" ni "ganadas" desde un "afuera". Debemos pensar a las formas de consciencia de la clase obrera de una forma menos pasiva y lineal. El socialismo no es la única forma de consciencia válida que engendra la clase obrera. La forma espontánea en la que se encuentra la clase es la dispersión y la competencia. Estas formas de competencia generan formas ideológicas (mutiladas e invertidas). Los programas que surgen de ahí también son "programas de clase" porque no existe nada que no sea un "programa de clase", ya que todos expresan formas de consciencia de la clase obrera.
De la misma forma, también debe abandonarse la categoría de "partidos obreros" para pensar la política. En principio hay que partir de que todo partido de masas expresa la solidaridad de fracciones de la clase obrera y de la burguesía. Todo partido de masas necesariamente es un partido compuesto en su mayoría por diferentes fracciones de la clase obrera. Son partidos que expresan solidaridades compartidas entre éstas facciones y otras de la burguesía. Y esto es así porque la clase obrera y la burguesía comparten la misma substancia, no son cosas exteriores entre sí. Ambas son personificaciones del capital en tanto movimiento autónomo. Leer esta situación con el término caprichoso de "traición" o de "engaño" es un error. De allí que decir que un partido es "obrero" es una categoría sin sentido. Los partidos deben evaluarse en función de sus atributos concretos: Qué tipo de solidaridad expresan, que fracciones de la clase aglutinan y cómo eso se expresa en un programa. Luego, a partir de esa generalidad, se puede ver el fenómeno concreto de la existencia de partidos de masas que sólo hayan expresado la solidaridad entre fracciones del proletariado CONTRA la burguesía. Esos son partidos socialistas, no obreros. Su especificidad es esa, no el estar compuestos y apoyados mayoritariamente por asalariados. Llamar "obrero" a cualquier partido simplemente por levantar a un programa socialista es caer en una confusión de términos.
Comments